Si existe una red de seguridad económica en España, es la que forman las pensiones no contributivas. Estas prestaciones están dirigidas a garantizar la subsistencia de aquellas personas que carezcan de recursos suficientes y que no hayan cotizado lo suficiente como para alcanzar las prestaciones del nivel contributivo. Pero, ¿qué son este tipo de pensiones y cuáles son los requisitos para acceder a una pensión no contributiva en 2022?
En la actualidad, hay cerca de medio millón de personas que reciben una pensión no contributiva en España, según datos de la Seguridad Social. Cerca del 65 % son por jubilación y el resto por invalidez. Las pensiones no contributivas se fijaron por ley en el año 1990 y desde entonces están diseñadas para funcionar como un escudo social para aquellos ciudadanos en estado de necesidad que no hubieran cotizado nunca al sistema de la Seguridad Social o no lo hubieran hecho el tiempo suficiente para causar derecho a pensiones contributivas.
Estas pensiones se financian con cargo a los presupuestos del Estado, mediante transferencias de crédito al presupuesto de la Seguridad Social. A diferencia de las prestaciones contributivas, la gestión de las pensiones no contributivas es competencia de los órganos establecidos en cada Comunidad Autónoma y a las Direcciones provinciales del Instituto de Mayores y Servicios Sociales (IMSERSO) en las ciudades de Ceuta y Melilla.
Existen dos modalidades de pensiones no contributivas: por invalidez y por jubilación. Ambas tienen requisitos de acceso compartidos y algunas particularidades. Tal como detalla la web del IMSERSO, para acceder a una pensión no contributiva el beneficiario debe carecer de ingresos suficientes. En los cálculos de 2022, esto significa que sus ingresos anuales deben ser inferiores a 5899,60 euros.
En este cómputo se tienen también en cuenta las rentas o ingresos anuales de todos los miembros de la unidad económica de convivencia del beneficiario. Esta unidad económica de convivencia se establece en todos los casos en que el beneficiario comparta vivienda con otras personas unidas con este por matrimonio o por lazos de parentesco de consanguinidad o adopción hasta el segundo grado (padres, abuelos, hijos, nietos y hermanos. Eso sí, en este caso el límite de ingresos anuales se incremente en función del número de convivientes:
Para acceder a las pensiones no contributivas de jubilación deben cumplirse otros dos requisitos: tener 65 años o más y residir en territorio español y haberlo hecho durante al menos 10 año en el período que va de los 16 años de edad hasta la fecha de devengo de la pensión.
En cuanto a los requisitos específicos de las pensiones no contributivas de invalidez, la ley establece que el beneficiario debe tener 18 años o más y menos de 65, residir en territorio español y haberlo hecho durante un período mínimo de cinco años y tener un grado de discapacidad igual o superior al 65 %.
En línea con la revalorización de las pensiones contributivas, los últimos presupuestos generales del Estado y el Real Decreto 65/2022, de 25 de enero, sobre actualización de las pensiones del sistema de la Seguridad Social, de las pensiones de Clases Pasivas y de otras prestaciones sociales públicas para el ejercicio 2022, contemplan la subida de las pensiones no contributivas para este año.
La subida para 2022 es del 3 % respecto a la cuantía establecida para el año pasado. Así, el importe máximo de las pensiones no contributivas es de 5899,60 euros anuales (abonados en 14 pagas), o 421,40 mensuales. Además, durante el primer trimestre del año se abonó una paga adicional para minimizar la pérdida de poder adquisitivo de los pensionistas ante la subida de los precios.
La cuantía individual de cada pensión no contributiva se calcula en función las rentas del beneficiario y de las de su unidad de convivencia, aunque en ningún caso podrá ser inferior a un mínimo marcado por el 25 % de la pensión íntegra (equivalente en 2022 a 1474,35 euros anuales). Además, los pensionistas de invalidez no contributiva cuyo grado de discapacidad sea igual o superior al 75% y necesiten la asistencia de otra persona percibirán un complemento del 50 % de la cuantía íntegra.
Por último, a finales del mes de junio el Consejo de Ministros aprobó un Real Decreto-Ley de medidas temporales para paliar los efectos del conflicto en Ucrania en el tejido empresarial y entre la población más vulnerable. Este paquete de medidas incluye, entre otras cosas, una subida transitoria del 15 % del Ingreso Mínimo Vital y de las pensiones no contributivas de jubilación e invalidez hasta final de año.
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