En busca de una jubilación tranquila: ¿cuáles son los mejores países para ser pensionista?

Cuando llega el momento de jubilarse, toca tirar de calculadora. Algunas cuentas son más fáciles de hacer, como cuál va a ser el importe de la pensión pública o cuánto suman los ahorros de toda una vida de trabajo. Otras son un poco más complicadas, como saber de cuánto dinero se va a disponer teniendo en cuenta la esperanza de vida o cuánto va a costar mantener el nivel de bienestar y gasto.

Todos estos elementos van a influir en cómo se va a vivir una vez abandonado el mercado laboral. La situación varía enormemente entre países, no solo por el coste de la vida en cada uno, sino por las prestaciones e ingresos que se puedan percibir en cada estado. Para entender un poco mejor el panorama, la compañía de crédito NetCredit acaba de publicar un estudio en el que analiza cuáles son los peores y los mejores países para jubilarse.

El ahorro y el nivel de vida en la jubilación

Tras cuatro décadas trabajando (de media), la mayoría de los pensionistas y trabajadores cercanos a la jubilación tienen un objetivo: mantener su nivel de vida una vez abandonado el mercado laboral. En función de los sistemas de cada país, las cantidades percibidas a través de las pensiones públicas varían mucho.

Sistemas como el español han ofrecido, hasta ahora, pensiones de jubilación que se han ajustado, en gran medida, a las expectativas de cada trabajador retirado. Sin embargo, el equilibrio del sistema está en riesgo desde hace años, ya que cada vez es menor el número de trabajadores activos (que pagan las pensiones a través de sus cotizaciones) con respecto al de pensionistas.

Para tener una jubilación tranquila es necesario ahorrar e invertir durante la vida laboral y así tener un colchón económico sobre el que descansar.

Por eso, se hace cada vez más necesario buscar fórmulas para complementar la pensión pública, ingresos que pueden haberse generado a través del ahorro privado y la inversión en instrumentos como los fondos de pensiones o a través de planes de pensiones de empresa. Es decir, para tener una jubilación tranquila es necesario ahorrar e invertir durante la vida laboral y así tener un colchón económico sobre el que descansar.

Los mejores países para ser pensionista

Con el objetivo de saber de cuánto debería ser ese colchón, el estudio de NetCredit analiza las realidades de la mayor parte de países del mundo. Eso sí, para hacerlo toma como referencia los datos de esperanza de vida y edad media de jubilación de Estados Unidos. Es decir, los cálculos están hechos partiendo de que el jubilado abandona el mercado laboral a los 64 años y vive hasta los 78 (en España, la esperanza de vida es más alta, pero el cálculo sirve como referencia).

El informe busca determinar la cifra con la que podríamos mantener un buen nivel de vida. Es decir, pagar o mantener una vivienda y los gastos básicos, hacer salidas de ocio dos veces por semana, comprar ropa y complementos de forma moderada o hacer un par de viajes al año. En función del coste de vida de cada país, el precio de pagar por este nivel de vida será mayor o menor.

Así, el estudio concluye, por ejemplo, que un pensionista medio en Estados Unidos deberá disponer de algo más de 600.000 dólares a lo largo de su jubilación, cantidades en las que entran tanto los aportes públicos como el ahorro privado. Se trata del segundo país más caro de Norteamérica (solo por detrás de las Bermudas, donde es necesario disponer de más de un millón de dólares) y uno de los más caros del mundo para la jubilación.

Los acuerdos existentes en materia de pensiones dentro del espacio Schengen hacen que sea sencillo recibir la pensión de jubilación del país en el que se ha cotizado en cualquier otro territorio.

En el otro extremo del estudio aparecen Pakistán y Kirguizistán, en donde es necesario disponer de menos de 200.000 dólares para pasar una jubilación tranquila. También aparecen en la parte baja de la clasificación otros destinos económicos, pero más exóticos y atractivos, como Brasil, Colombia o Argentina, las islas Fiyi o buena parte de los países del Sudeste Asiático, donde se puede disfrutar de un retiro tranquilo por menos de 300.000 dólares.

Las diferencias entre los países europeos

La posibilidad de disfrutar de los ahorros y la pensión de jubilación en otro país es real, pero en ningún lugar es tan evidente como, seguramente, en Europa. Los acuerdos existentes en materia de pensiones dentro del espacio Schengen hacen que sea sencillo recibir los ingresos de la pensión de jubilación del país en el que se ha cotizado en cualquier otro territorio. Sin embargo, el importe no rendirá de la misma manera en cada sitio.

El país europeo más caro para pasar la jubilación es Suiza (donde hacen falta cerca de 850.000 dólares) y el más barato, Georgia (215.000). Más allá de los extremos, en el informe salen bien parados países como Grecia, Croacia, Portugal y España, todos en el abanico de entre 350.000 y 450.000. La diferencia con los países nórdicos, donde hacen falta más de 650.000 dólares, es evidente.

Este estudio no deja de ser un análisis sobre el coste de la vida en cada país, pero deja de lado otros elementos como los servicios públicos a los que se tiene acceso en cada territorio. Por otra parte, aunque no tiene en cuenta la cuantía de la pensión pública de cada país, sí resalta la importancia de contar con ahorros para disfrutar de una jubilación tranquila en la que no se pierda calidad de vida.

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