Riesgo, aunque entraña aventura e, incluso, nuevas oportunidades, lo cierto es que la mayoría buscamos reducirlo al máximo. También el mundo empresarial busca mitigar el riesgo, y aquí es donde entran en juego las aseguradoras cautivas o, simplemente, cautivas. Pero, ¿de qué hablamos cuando nos referimos a una cautiva? ¿Qué es una cautiva en seguros?
En posts anteriores ya te contamos cómo una cautiva puede ser un excelente recurso para la gestión de los beneficios sociales de tus empleados, y también te contamos por qué creemos que las cautivas suponen una oportunidad en auge para aquellas empresas que busquen crecer gestionando correctamente el riesgo. Hoy, sin embargo, vamos a profundizar en el concepto para que no queden dudas sobre qué es una cautiva y cómo puede aportar valor a tu empresa. Arrancamos.
Una cautiva puede ser muchas cosas, pero, en esencia, es una solución flexible que ayuda a una empresa a reducir el coste del riesgo. Con más detalle, son sociedades o filiales de seguros creadas dentro de un grupo matriz para asegurar todo o parte del riesgo de la compañía.
Las aseguradoras cautivas son una práctica extendida en grandes empresas y sirven para optimizar el control de riesgos a nivel global. Además, pueden ayudar a crear nuevas fuentes de ingresos y contribuyen a cubrir riesgos que, de otra forma, no podrían ser asegurados.
La idea principal detrás de crear una cautiva es mantener el riesgo dentro de la empresa y no externalizarlo. Las aseguradoras cautivas suelen estar en un territorio deslocalizado (en inglés, offshore), y retienen el riesgo de la compañía con el objetivo de reducir los costes de las primas.
Entendido qué es una cautiva, la primera pregunta que surge es, ¿cómo, una cautiva, puede aportar valor a mi empresa? Las soluciones que genera una asegurada cautiva pueden ser medidas de formas muy diferentes.
A un nivel más general, las cautivas significan una reducción de costes, una mayor eficiencia en los programas de seguros, soluciones innovadoras a problemas que parecían irresolubles, nuevas vías de ingresos o una mayor consistencia y seguridad en las operaciones de la compañía.
Más específicamente a nivel seguros, para Willis Towers Watson el valor de las cautivas reside en ser capaz de solventar problemas que, de lo contrario, no tienen solución; poder abordar de forma diferente las perspectivas de los clientes y, sobre todo, integrar lo mejor de la experiencia de una gran aseguradora en la estructura empresarial de los clientes.
Entre las organizaciones que se deciden por utilizar las soluciones que proporciona una aseguradora cautiva se encuentran compañías con una base de clientes muy amplia, empresas cuyo gasto en seguros es muy elevado o compañías que se enfrentan a riesgos complejos, como los que se crean al trabajar a escala internacional.
Sin embargo, en los últimos años, ha sido el incremento del coste de los beneficios sociales de los empleados lo que ha impulsado a más compañías internacionales a apostar por las cautivas para mejorar el rendimiento de los planes sociales de sus trabajadores. Según el último informe al respecto de Willis Towers Watson, el uso de cautivas para financiar los beneficios de los empleados genera un ahorro medio de entre el 15% y el 25%.
De forma más concreta, los contratos de seguros de vida a través de cautivas fueron los más rentables, ya que generaron, de media, un superávit del 27%. Los contratos de salud produjeron una media de rentabilidad del 0.7%. En ambos casos, los márgenes fueron considerablemente más altos que los alcanzados mediante otras soluciones, como los pools multinacionales.
Así, en una esfera empresarial cada vez más globalizada, las cautivas se presentan como la gran alternativa para reducir los riesgos en un entorno lleno de desafíos, ya sean bien conocidos o difíciles de prever.
